jueves, 29 de septiembre de 2011

MANIFIESTO DEL NEOMURALISMO

MANIFIESTO DEL NEOMURALISMO.
1.- Todas las escuelas de arte han fallado como medio de enseñanza artística.
2.- El gran arte monumental está a punto de crearse.
3.-Cada época de la historia del arte aporta una pieza del gran rompecabezas que los neomuralistas formaremos.
4.-El tiempo de las naciones terminó.
5.-Disciplina absoluta será nuestra total libertad.
6.- El ser humano está a pocos instantes de convertirse en viajero cósmico, la ciencia será su medio y el arte su único equipaje.
7.-El arte vive en la media noche, su amanecer se encuentra en Latinoamérica.
8.-Siendo este un manifiesto escrito en México, retomamos el valor y la importancia de los grandes muralistas como gestores de un movimiento que ha permanecido inerte en su fase primaria.
9.- Con este manifiesto se exhorta a la raza humana a caminar juntos por primera vez en la historia como seres espirituales en el universo.
Santiago Navarro . Mexico DF. Septiembre 2011. Borrador

martes, 6 de septiembre de 2011

ANDREAS FEININGER

Andreas Feininger (27 de diciembre de 1906 - 18 de febrero de 1999) fue un fotógrafo norteamericano de origen alemán, que fue alumno y profesor de la prestigiosa Escuela de la Bauhaus de la Alemania de entreguerras. Su padre era Lyonel Feininger, uno de los profesores de dicha escuela y pintor vanguardista relacionado con el expresionismo.
Criado y educado en Europa, donde estudió en la Bauhaus de Weimar y en la escuela de arquitectura de Zerbst, comenzó a trabajar como arquitecto antes de dedicarse a la fotografía. En 1930 hizo sus primeras publicaciones fotográficas y en 1932 se trasladó a París donde estuvo trabajando con el arquitecto suizo Le Corbusier. Después inició un negocio de fotografía industrial y de arquitectura en Estocolmo, pero con la ascensión de Hitler al poder y la extensión de la guerra por Europa emigró a Estados Unidos en 1939, donde trabajó para la revista Life y produjo sus primeras imágenes exitosas, en ese momento centradas en la vida urbana de Nueva York.
Andreas Feininger dedicó su vida a la exploración de la fotografía artística y científica. Su visión creativa parte de la base de que la cámara es superior al ojo, y que una fotografía puede plasmar un mundo más gráfico y real.
Desde sus primeras fotografías, pasando por las dos décadas en que trabajó para la revista LIFE, y hasta sus últimas imágenes, realizadas en la década de 1980, se puede apreciar en la obra de Feininger una gran sensibilidad para el sentido compositivo.
Feininger no tenía la intención de ser fotógrafo ni artista, pese a haberse criado en las faldas de la Bauhaus. Y es que, aunque nacido en París, ha pasado más tiempo de su vida en Nueva York y, sobre todo, en Alemania, donde realizó sus estudios primarios en la Escuela Primaria de Zehlendorf, un suburbio de Berlín. Meses más tarde se trasladó junto a su familia a Weimar, donde su padre había sido invitado por Walter Gropius para ser profesor en la recientemente creada Escuela de Bauhaus. Fue entonces, en 1922, cuando el joven Feininger se acercó a dicha escuela, diseñando trampas para animales. Tras los exámenes, tomó la decisión, fascinado por las manifestaciones de la naturaleza en forma de fósiles y mariposas, de ser científico, pero no fue admitido en la facultad de Ciencias de la ciudad. Como solución de compromiso, decidió seguir colaborando con la Bauhaus y, terminado su período de formación, optó por estudiar Arquitectura, entrando a formar parte del Instituto Técnico de Weimar y, más tarde, del de Dessau.
Se inició así su relación con la fotografía que en absoluto debe entenderse como una fascinación repentina. Dado que nunca había estudiado para ello, a fin de corregir sus deficiencias técnicas se matriculó en un curso de fotografía con Walter Peterhans. Allí entró en contacto con fotógrafos de la talla de Moholy Nagy, con quien le enfrentaba ese concepto abstracto y místico de la fotografía defendido por éste. Poco aprendió, en lo que a técnica se refiere, con Peterhans, por lo que decidió seguir una formación autodidacta construyendo un laboratorio en su casa: “los libros no puede aportarme nada, tan sólo mi trabajo puede hacerlo”.

Desde muy joven vio en la fotografía la manera de hacer “documentos” de aquello que consideraba importante: naturaleza, arquitectura, escenas urbanas y retratos de gente próxima a él. Es más, esta actitud es la que ha permanecido en su obra, varias décadas después: “la cámara no es más que un medio que me capacita para comunicarme con otra gente”, y pese a que hable de la foto como documento, para él ojo y cámara ven de manera distinta. Es por ello que entiende sus imágenes como “mentiras pictóricas”, en el sentido de que no muestran “lo que yo he visto” sino más bien “lo que creo que he visto”.

Se han publicado 50 libros sobre Andreas Feininger, incluyendo libros de texto de los que él ha sido autor. En 1983, el British Broadcasting Corporation incluyó a Andreas Feininger en un documental televisivo sobre los fotógrafos vivos más importantes, el resto de los elegidos fue: Ansel Adams, Bill Brandt, Alfred Eisenstaedt, André Kertész, y Jacques-Henri Lartigue.